lunes, 14 de octubre de 2013

Tarde

Tarde vuelvo a escribir, tras este largo verano que me ha tenido eternamente ocupado, por, entre otras, interesantes cosas que habrán de ser aquí tratadas. Pero lo que más me urge, es dar a conocer un destrozo producido en uno de los mapas que he tenido el placer y el suplicio de elaborar en este tiempo. La Dehesa de Carrascosa. Aquí va la noticia en medios. La denuncia de los ecologistas (con fotos), y la respuesta de la administración.

WWF y Ecologistas En Acción denuncian la tala de árboles centenarios en Carrascosa de la Sierra

http://www.vocesdecuenca.com/frontend/voces/WWF-Y-Ecologistas-En-Accion-Denuncian-La-Tala-De-Arboles-Centenarios-En-Carrascosa-De-La-Sierra-vn31471-vst95

Agricultura explica que las talas en Carrascosa de la Sierra buscan la regeneración de la masa forestal

http://www.vocesdecuenca.com/frontend/voces/Agricultura-Explica-Que-Las-Talas-En-Carrascosa-De-La-Sierra-Buscan-La-Regenerac-vn31478-vst95

Se pueden y se deben cortar pinos. La Sierra es lo que es (y aún fue bastante mejor) porque se han cortado pinos, y se llevan siglos cortando pinos. Pero una cosa es cortar, y otra cortar sin cerebro. Y esto es lo que se ha hecho, al menos en algunos casos.

Por ejemplo, NO se deberían cortar 5 pinos centenarios juntos en plena solana y en cresterío, que habían generado una sombra y una capa de suelo imposibles en ese lugar, y que ahora se perderá y se convertirá en un secarral de aliagas cualquiera (ha sucedido, y me ha hecho tener que modificar lo ya cartografiado, lo que da una idea de su impacto).

NO se debería cortar un pino tirándolo sobre un roble de trescientos años al que va a descuajar en su caída (ha sucedido).

NO se deberían cortar unos pinos tan grandes, que luego no van a caber ni en la máquina y se van a dejar pudrir por no saber qué hacer con ellos (cosa que espero aquí no llegue a suceder, pero sí ha pasado muy cerca y recientemente).

NO se deberían cortar pinos de doscientos años que, al precio al que está la madera actualmente (gracias a un contexto de globalización de precios y de población desinformada comprando madera de bosques sobreexplotados en terceros países por mano de obra regalada), serán monumentos vivos, como acertadamente los denominan los ecologistas de la primera noticia, convertidos en palés que acabarán quemados en alguna obra. Un Pinus nigra de doscientos (200) años de la Sierra de Cuenca no debería tener ese fin. El que escribe tiene la intención de comprar uno de esos monumentos cortados. Y es que no soporto tal derroche de energía, materia, y patrimonio vegetal en definitiva. Con él me haré un par de mesas de las de verdad, no de Ikea. Hay vigas de estos pinos en edificaciones del Toledo histórico que se acercan al milenio...

Estas líneas no son, o no quieren ser, una crítica sin más, en plan "todo lo que hace el hombre es malo". Nada más lejos. Estas líneas pretenden ser mi grano de arena para crear, o mejor dicho recrear (porque no es nueva en Cuenca), cultura de la madera. Que es cultura forestal, cultura de preservar, cuidar, mimar, y también cortar. Con cabeza. Cultura de conocer en qué entorno vivimos, cómo funciona, qué pieza dentro de nuestro planeta es, cómo gestionarlo a largo plazo y potenciarlo para que de sus mejores frutos, para nosotros, y para quienes nos sucederán dentro de siglos.

Los pinos, los bosques están ahí para darnos sombra, setas, piñas, caza, leña, miel, especias, protección ante la erosión, agua limpia, oxígeno, un marco inmejorable para las carreras de orientación, y también madera. Pero haciendo las cosas bien, por favor.

Para quien no conozca la Dehesa, la Dehesa es esto:



lunes, 17 de junio de 2013

Cerrado por... curro intensivo

Siento hacer esta pausa nada más haber empezado casi el blog, pero las obligaciones me llaman y muy probablemente hasta que termine julio no podré escribir.

I'm sorry for this interruption now when I just started the blog but I have no choice. Some weeks of intensive work are ahead. I'll be back by the beginning of August.


martes, 4 de junio de 2013

Entrenando

Después de un mes totalmente parado por una lesión estúpida, un invierno saliendo a correr un par de días por semana y tras una semana y pico corriendo, ya empiezo a encontrarme cual lobo salvaje y me veo con fuerzas para meterme el primer entrenamiento serio: 60-60 por el monte.

El objetivo del entrenamiento es correr 60 minutos en una dirección determinada, y volver en sentido contrario, atravesando el monte en línea recta haya lo que haya (bueno, casi, no nos vayamos a empotrar en un pino). La serranía es perfecta para esto. Así que elijo rumbo casi norte para llegar a la enorme torreta del Bosque de Valsalobre, ya conocida. El ritmo... ni suave ni duro, lo justo para el primer entrenamiento de dos horas. Atravieso en este recorrido un pinar de Pinus nigra (por cierto, y valga en adelante en este blog: uso los nombres latinos no por ansia pedante sino porque la gente usa nombres diferentes en cada sitio y albar/negral para unos es el contrario que para otros, así que para dejarnos de tonterías uso el nombre del Imperio), aliagar, espinar, praderita en su máximo esplendor primaveral, un par de muros abandonados en la vieja Dehesa de Valsalobre, alguna pista poco concurrida que cruzo en perpendicular, quejigar centenario, un tocón de pino de más de un metro de diámetro que me pone los pelos de punta, una dolina, de nuevo algo de aliaga y finalmente estoy en el Bosque de Valsalobre. Pinar de Pinus sylvestris tipo Peguerinos pero... cárstico. Muy cárstico. Uno de los mejores de la Península para orientación, sin dudísima, pero con importantes inconvenientes para organizar una prueba.

A los 50' me encuentro de lleno con la torreta de Valsalobre. Objetivo conseguido, sigo un poco más disfrutando del magnífico Bosque de Valsalobre, y vuelta. Por supuesto, sin ver ningún animal de dos patas. De cuatro sí: dos corzos, dos ciervos y un jabalí.


Para dar idea de lo que es el Bosque de Valsalobre, pongo alguna imagen de final del verano pasado.





Al día siguiente de vuelta al mundo urbano me paro en un sitio que tengo ganas de explorar desde hace tiempo. La Muela del Rebollar, entre Poyatos y Santa María del Val, una de las zonas con peor carretera de acceso de la sierra. Entreno de rodaje simplemente para reconocer la zona, con multiples paraditas.



Creía que podía ser bueno y no me equivocaba. Formaciones rocosas no hay (o no he visto) pero puede ser muy válido. Sobre todo excelente para una prueba tipo "rogaine" de verdad. No de correr por sembrados y algún retazo de bosque. De meterse 6 horas de traqueteo por un bosque de verdad, no especialmente cerrado pero desde el que casi no se puede atisbar el horizonte, con relieves negativos y sin referencias salvo curvas de nivel suaves y algún clarete esporádico. Pero bueno... somos pocos, la sierra grande, y hay otras prioridades. 

En resumen: muy contento de poder entrenar en condiciones por el monte otra vez.

¿Porqué Cuenca?

¿Porqué Cuenca es un tesoro para la orientación?

Al grano. La primera razón es bastante evidente incluso para quien no la haya pisado: superficie forestal. La mayor superficie absoluta de bosque dentro de una provincia en España la tenemos en Cuenca: concretamente 666.349 hectáreas de bosque según el último inventario forestal (descontando dehesas y zonas forestales desarboladas).

Esto significan unos 6.663,49 km2 de bosque... que prácticamente no hemos usado hasta ahora.
Haciendo una comparación con otras provincias boscosas como Soria o Burgos (que también me encantan, por otra parte) vemos que estas tienen 323.727 y 338.332 hectáreas respectivamente (y sí, Burgos más que Soria).  Esto significa que la provincia de Cuenca tiene incluso algo más de bosque que estas dos juntas (contando también ambas con mucho terreno y de grandísima calidad).

En segundo lugar está la gran proporción de este terreno forestal que es público (herencia de una larga historia de montes de gestión comunal -lo cual además revierte en una sociedad implicada con su fuente de caza, madera y leña, setas, pasto...-) y por tanto con mucha más facilidad de acceso, permisos... para organizar una carrera de orientación.

La siguiente caracteristica viene dada por su altitud, clima y naturaleza calcárea: el agua se infiltra a capas profundas de la tierra fácilmente; esto es una ventaja para los árboles y un freno para la vegetación herbácea y arbustiva (a las que las heladas ponen ya bastante a raya además), lo que significa que crece mucha menos hierba y matojos, que tan desagradables son en verano al secarse, que en otras zonas. Esto significa no pinchos en los calcetines o muy pocos.

La serranía es fría. Aunque parezca una obviedad, estamos dentro de los vértices del triángulo del frío peninsular (Montes Universales, Moncayo y Sierra de Ayllón) y eso significa por un lado, heladas siberianas, sin exagerar (hay pueblos con problemas porque se hiela el gasoil de los coches en invierno). Por otro, pocos días al año se rebasan en las muelas serranas los 30º en verano, y en verano hay veces que hiela. Sí, hiela. En julio y en agosto hay, de vez en cuando, heladas en la serranía. Pero si el frío es un aspecto más o menos común a todas las zonas de montaña, aquí destaca variación térmica diaria. Cambia mucho la temperatura entre el día y la noche. Entre el amanecer y el mediodía se pueden dar diferencias de más de 20º sin dificultad. Esto a priori sería un inconveniente, pero tiene su punto positivo: tanto en verano como en invierno se puede encontrar un momento en el día en el que se puede practicar el deporte bastante agusto. Simple: en invierno buscando el mediodía casi siempre estaremos sobre 0ºC, y en verano evitándolo, estaremos por debajo de 25ºC. Por otra parte, haciendo frío nieva, pero no tanto como en otras zonas. Salvo en la muela de San Felipe y otras cercanas a partir de 1.500 m, es dificil que se acumulen más de 20 cm de nieve.



Por si fuera poco, el relieve también pone de su parte, y es que la Serranía es en realidad una "llanura" dentro de una zona montañosa. La estructura general de esta sierra no es de picos y laderas interminables, sino que se compone de pequeñas "muelas" o zonas elevadas de relieve relativamente suave, cortadas por hoces fluviales, estas sí, casi verticales, de unos 300 m de desnivel de media. Geológicamente está dividida a groso modo entre calizas y areniscas. Las areniscas dan lugar a espacios con múltiples vaguadas; mientras que la caliza, predominante, nos ofrece por una parte relieves negativos en forma de depresiones, dolinas y torcas, y por otra la gran peculiaridad de la serranía: las "ciudades encantadas" o tormagales que llegan a ser auténticos laberintos de piedra. Esto sumado es igual a un infinito de formas de relieve diferentes. Y en variedad de vegetación forestal, no se puede uno quejar: tenemos pinos de 4 especies, encinares y quejigares de todos los tamaños y densidades.



Pero como en todo en la vida, también nos vamos a encontrar con algunos inconvenientes, sobre todo derivados del despoblamiento contemporáneo del área:

1. La infraestructura hostelera es muy reducida. Por tanto para celebrar una gran prueba (más de 1.000 personas) y cubrir las plazas de alojamiento necesarias, hay que abarcar prácticamente toda la sierra. Un inconveniente que se puede más o menos salvar con una buena planificación.

2. La aliaga jejeje. Para los desconocedores de la aliaga, este es una especie de arbusto espinoso que se da en toda el área caliza de la mitad este peninsular - especie de tojo "light"- sin cuyos pinchacitos en carrera, correr en Cuenca no sería lo mismo. En este blog los vecinos alcarreños hablan de ella:
http://alcarriafloraypoesia.blogspot.com.es/2009/08/aliaga.html
Tal es su importancia que ha influenciado a grandes artistas de la Iberia profunda como este: http://www.youtube.com/watch?v=Z8RS_EpHRII
Es broma. Es un matojo abundante y a veces un incordio pero no una tortura insufrible como los tojos del Cantábrico.

2. Este sí, de verdad: el monte, si bien ha estado muy mimado por una población cuidadosa durante siglos, empieza ahora a sufrir la misma falta de cuidados que en otros lugares. No queda apenas ganado, las dehesas se están comenzando a llenar de zarzas y aliagas, con lo que ello implica de reducción de terreno para nuestros trazados, y sobre todo aumentan la virulencia y peligrosidad de los incendios forestales. Esta despoblación es más complicada de salvar a corto plazo, y el principal peligro que acecha a la serranía.

El botánico y geógrafo alemán Willkomm, tras sus viajes por la Península Ibérica en el siglo XIX, con una España sumida en el analfabetismo profundo, dejó escrito que la Serranía de Cuenca era la mejor masa boscosa de Europa. Willkomm se encontraba en su periplo serrano con pinos Pinus nigra de 1.000 años de antigüedad, mientras actualmente los ejemplares más viejos de la Serranía tienen unos 500 años.

Esto da fé de que lo que tenemos ahora es solo una parte de lo que puede llegar a ser, con un poco de cuidado. Los usos antiguos nos han dejado esta Serranía, que resulta que por los motivos que digo, es un tesoro para las carreras de orientación. Ahora estos usos antiguos ya no existen, o han disminuido dramáticamente: este territorio necesita una nueva utilidad que permita su conservación.

¿Seguro que no tenemos lo que Suecia o Finlandia? Tanto en proporción de bosque, como en densidad de población (2-3 hab/km2) la Serranía de Cuenca anda bastante parecida a Laponia... bastante al norte de Suecia y Finlandia. Y lo tenemos aquí, a dos horas de Madrid, Zaragoza o Valencia. Y con las horas de sol que hay en el centro de la Península Ibérica, no las de Escandinavia.



Y... no podía acabar sin lanzar "mi puyita": ¿dónde está el futuro de la orientación española? ¿en hacer un calendario extensísimo, y carísimo en gastos de transporte, basado en gran parte en carreras allá donde el ayuntamiento/comunidad de regantes de turno dé más dinero a la organización? ¿o donde encontremos terrenos de calidad que nos sirvan para disfrutar, motivarnos, y mejorar técnicamente como orientadores? En el contexto económico actual y al precio al que está el combustible, ¿nos podemos permitir mover a los competidores 300 ó 700 km para que corran un cross como en el que uno podría hacer en el parque de enfrente? No voy a hablar de pruebas. Pero las ha habido, y me temo que las habrá.

Una cosa son las pruebas a nivel local, en las que uno corre y se vuelve a comer a casa. Pero subir de escalón en la distancia e irnos a pruebas de dos días con un desplazamiento y gasto importante, tiene que implicar también subir un escalón en la calidad de una prueba de orientación. Para eso hay que pensar... en la Serranía, sí, pero también en casi cualquier otro lugar. En prácticamente cualquier provincia se pueden encontrar terrenos de calidad para carreras de orientación. Simplemente hace falta ponerse en el lugar de quien vaya a venir de más lejos a nuestra prueba ¿qué le vamos a ofrecer?

Sin más. A quien le interesen estas ideas, igual le gusta nuestro proyecto:

www.trofeoserraniadecuenca.blogspot.es

martes, 28 de mayo de 2013

Visita al Norte

Bien, entramos ya en materia. Empezamos con las entradas de carreritas, aunque esta temo que será un paréntesis, porque no me sobra precisamente el tiempo para mí. En primer lugar por los curros diversos en que andamos embarcados esta generación, unos obligatorios y otros por puro masoquismo orientador, y cierta lesión en el muslo... parece estar ultimamente de moda entre los orientadores el clavarnos cosas en las piernas, y por supuesto el brutito del bolo no iba a ser menos.

Así que conseguí abrir este paréntesis para escaparme a las tierras muy queridas para mí de la Ribera del Duero y la Liga Norte, que nunca me han defraudado. Puestos allí temprano y con una hora de salida "tardisma" por ser ahora extranjero en la Liga ¿habrá que remediarlo? me entretuve charlando con los viejos amigos, y viendo el paisaje de la zona. Bosque de quejigo y sabina, una de las razones que me trajo allí, pues en la Serranía de Cuenca hay muchas zonas así, y la buena labor de Bernardo cartografiando es una gran referencia. La verdad es que me esperaba algo más de sabinar pero era casi todo quejigar. Tipo de bosque que por otra parte, deberíamos buscar y utilizar más para carreras. Es muy interesante porque reduce la visibilidad dando casi siempre "verde 1" (en verano), cosa que los orientadores españoles en general necesitamos practicar más (¿cuánto tarda en aparecer al viajar a Centroeuropa el comentario "el blanco es verde"?) y al mismo tiempo suele ser un bosque bastante penetrable, sin mucha broza jodiente, y también genera por sus hojas caducas un suelo más regular y suave de pisar que otros bosques de clima mediterráneo.

Bueno, ya vale de comentarios ambiental-paisajísticos, y pasamos a analizar mi carrerita:


Salida "con ganas" cerro para arriba, leyendo prácticamente solo curvas de nivel, más algún otro detalle pero en general simplificando a curva:
1: sin problemas, cerro para arriba, casa y hacia el otro lado
2: sin problemas (muy bonita por cierto con ese cruce de vaguadas) peeeero llegamos a la 3.
3: primera baliza en la que las curvas se distancian. Zapatazo. Me la esperaba en el borde del desnivel y nones. Error: no leer detalladamente la entrada al control. "Rebote" en el borde, parada a hacer la tarea atrasada, comprobada la curva y flechado a por ella.
4: sin problemas leyendo de nuevo solo la curva,
5: lo mismo pero con un poco de "remanguillé" al final, porque me la imaginé algo más alto en la ladera.
Y llegamos a la 6: se masca la tragedia. Una maldita zona plana de las que me traen de cabeza siempre. El cabroncete de Angelillo dice  que es "como ponerlo en una mesa de billar, el bolo va rebotando en los bordes hasta que acierta". Y fue literalmente mi actuación en esta baliza. Mi intención primera fue dejarme llevar por los rayados y manchas verdes un poco al este de la baliza, pero la cosa se enturbió y no diferenciaba nada. Ví el camino e intenté entrar desde el borde sureño de la "mesa" pero erré el tiro y acabé en el borde norte, de ahí un poco hacia el oeste a localizar exactamente mi posición, y ya sí, a la tercera fue la vencida (a rumbo más o menos preciso)

Rumbo al sur, a la 7... había curvas de nivel, así que sin más problema. Bajada por la vaguada y a pillar el espoloncillo secundario al O. La 8, casa en medio de la ladera... a comérmela. Sin fallo, claro.
9: "esta es de las mías": ladera para arriba, cambio de vertiente, salto del primer saliente hacia el norte y a caer sobre ella cual rapaz sobre la presa.
10: rumbo este a groso modo hasta el borde de la mesa (menos mal que está en el borde). Vuelvo a errar unos metros en el ataque final, acabé casi en el vértice donde se abre la vaguada. Seguir alineación de cortados y sin más. 11: camino al norte, avituallamiento y 2a vaguada paralela en dirección NE-SO.
Tramo largo a la 12: HICE EL CANELO. Por abajo cuando los espolones me hubieran dejado encima. Me percaté cuando cruzaba la primera campa. Too late. A almorzarme la peor ladera pedregosa en solana del mapa. Mucha visibilidad al final, referencias claras en forma de grandes cuasitormos calizos: sin fallo.

La 13: cruzado por el paso obligatorio, rumbo oeste y en la primera planicie se veían bien los grandes vallejos que bajaban desde el norte. Después del segundo vallejo, segundo gran surco. Sin problemas.
14: y en esto me vino a ver el señor del mazo. Mira que me gustan las cuestas, pero aquí si que noté qué bajo estoy de forma. No hubo hue*** a terminarla corriendo. Entrada hacia el norte por aquel el segundo vallejo... pero sube... y sube... y sube... 50 metros de peste pudieron conmigo. La entrada al control, fácil: cambio de vertiente y seguir el borde norte de la alcarria.
15: aquí el verde rayado me confundió, y no salí de él en la dirección que esperaba (más al norte). Parada en seco de 15 segundos junto al cortado en el vértice NE de la alcarria con forma de rombo para relocalizar y una vez visto, a seguir el "dedo" en el que estaba la 15.
16: rumbo a todo meter hasta el cultivo, casa y a continuación surco que hay que seguir hasta la baliza. Estaba más bajo de lo que pensaba, pero OK.
17: a por el paso obligado, y saliendo de él árbol aislado y baliza en el surco principal.
18: rumbo y seguir el surco, pero estaba más abajo de lo que pensaba. Me paré demasiado a comprobar.
19: seguir el camino y se acabo la carrera :-(

Conclusión: las llanuras... mi eterna tortura... me costó encontrar referencias para apoyarme, fuera de la curva de nivel. El terreno muy bien, el mapa muy bien, el trazado muy bien (¿pero Bernardo, te vale la pena marcar los límites blanco-amarillo en zonas como lo que hay entre la 6, la 9 y la 10? yo como corredor ni de broma puedo distinguirlos).

Volví contento, por la carrera también pero sobre todo por los muy
buenos reencuentros. Necesitaría más días así. Peeero.

lunes, 27 de mayo de 2013

Lost in Tragavivos

Este blog tratará de las andanzas de una persona, orientador, y amante de la naturaleza, aunque prefiero decir "cuidador" o "guardián" de algo de lo bueno que hay en este mundo. Algo que debe permanecer al menos como está ahora, para aquellos que vendrán después de nosotros. ¿El nombre del blog? "Lost" es un vínculo evidente con la orientación. Tragavivos es un lugar real, una impresionante y remota hoz en la Serranía de Cuenca. Me gustan el lugar y el nombre. Algún día hablaremos de él en el blog...

Este blog no puede comenzar sin mencionar las famosas palabras:

Solo cuando hayáis cortado el último árbol, envenenado el último río y capturado el último pez, os daréis cuenta de que el dinero no se come.

Esto lo escuché por primera vez cuando estaba en 6° de primaria, de mi primer profesor de inglés y además el mejor profesor que he tenido jamás. Y cuanto más sé, más creo en su completa verdad. Nuestro sistema económico debería basarse en la fuerza generadora de la Tierra, no en la destrucción ciega de la misma. Lo que la Tierra genera es riqueza pura y objetiva. Lo que nosotros hacemos... a veces también lo es, a veces no, y a veces simplemente DESTRUYE esta riqueza. Si cortas algunos árboles del bosque, obtendrás madera, y los árboles que queden crecerán más rápido y producirán más semillas. Si cortas el bosque entero te harás rico vendiendo su madera, pero cuando la erosión se lleve por delante el suelo fértil y solo queden puros pedruscos, ¿qué comerán tus hijos? No podemos ser tan estúpidos como para destruir nuestra propia comida y agua.

La orientación es para mí, además de un deporte, un deporte en el que el "campo" es directamente esa fuerza generadora de la naturaleza, en forma de monte (acepción de monte del castellano tradicional = "bosque"). En el monte entramos en contacto directo con esa pura riqueza, que está ahí para utilizarla: no seré yo de quienes dicen que todo lo que hace el hombre es malo. Para utilizarla, no para echarla a perder.

ENGLISH VERSION

This blog is about the strolls of a person, orienteer, and nature-lover, though I prefer to define it as a "carer" or "guardian" of some of the good things that in the world are. Something that must be kept at least as it is now for those who will come after us. The name of the blog? The expression "lost" is an evident link with orienteering. Tragavivos "swallows the living" is a real place. It's an awesome and remote gorge in the Serranía de Cuenca. And I like both the place and the name.

This blog can't start without mentioning the famous words:

Only after the last tree has been cut down.
Only after the last river has been poisoned.
Only after the last fish has been caught.
Only then will you find that money cannot be eaten.


I heard this for first time when I was in 6th year of Primary education, from my first English teacher and also the best-ever teacher I had. And the more I know, the more I believe in its complete truth. Our economic system should be based on the generative force of the Earth, not on the blind destruction of it. What the Earth creates itself means pure and objective wealth. What we do... sometimes it is, sometimes it isn't, and sometimes just DESTROYS this wealth. If you cut down some trees, you'll get timber, and the remaining trees will grow faster and will produce more seeds. If you cut down the whole forest, you can get rich by selling its timber, but when the fertile soil is taken off by erosion and only rough stones remain, what will your children eat? We just can't be so stupid to destroy our own food and water.

Orienteering is for me, besides a sport, a sport where the "pitch" is this generative force of nature, in the shape of a forest. In the forest we are directly in contact with this pure wealth, which is there for us to use it: I'm not one of those who say that everything that man does is wrong. It's there for us to use it, not to waste it.

La dehesa en invierno


Empezamos el blog con una entrada retrospectiva, escrita en pleno invierno cuando pensé en crear el blog, pero que hasta ahora no he tenido tiempo de arrancar:

Y este lugar es, efectivamente, una dehesa... bastante diferente a lo que la mayoría entiende por dehesa, como las de Navalcán como prototipo. Sino una dehesa olvidada y salvaje, perdida en la inmensidad de la Serranía de Cuenca. Robles, quejigos centenarios rodeados por un mar de pinos. Que una nevada como esta la envuelve aún más en el misterio. A la mayoría de la gente si le piden que califique la nieve, dirá que blanca y fría. Cierto, claro, pero a mí me gusta, sobre todo, su silencio. Cuando de noche cae una buena nevada, suelo saberlo antes de salir de la cama, por ese silencio inconfundible. Dicen... que una persona se vuelve loca en menos de una hora bajo condiciones experimentales de silencio absoluto ¿mmm da que pensar?

Quizá, pero después de cualquier semana escuchando noticias que cada día provocan más bochorno, indignación y rabia en cualquier ser que se pueda llamar humano... uno está bastante agusto inmerso en este silencio. El único sonido que se escucha es el del viento, algún pájaro que pasa justo por encima de mi cabeza... es un buitre acechando una posible presa. Silencio tal que se puede escuchar el silbido de las alas del buitre contra el aire, a varias decenas de metros sobre mí. "No es tu día, pájaro. Vuelve al nido. Ninguna corriente ascendente de aire con esta rascaza, te vas a cansar".